Decía Abraham Maslow que una vez que nuestras necesidades básicas están cubiertas, el ser humano necesita sentirse realizado. Y, aunque esta expresión tan ambigua se materialice de forma distinta en cada persona, lo que sí sabemos es que está íntimamente ligada con la idea de sentido. Y, ¿qué mejor que mirar atrás para saber dónde quieres llegar?
A punto de finalizar el año, hoy te animo a que tomes consciencia de lo que han dado de sí para ti los últimos doce meses. De esta forma, te será más sencillo poner en orden tus objetivos de cara al nuevo año y diseñar un plan de acción coherente con tus deseos y tus posibilidades. Así que, coge aire y embárcate conmigo en este maravilloso viaje a tu interior.
FIN DE AÑO, FIN DE UNA ETAPA
Una de las características que definen al ser humano es su empeño por medir el tiempo. No se conoce otro ser vivo en la Tierra que viva tan condicionado por una idea semejante. Pero así es el hombre, y en su afán de control del medio que le rodea, también ha osado medir algo tan aparentemente intangible como es el tiempo.
Existen multitud de formas de medir el tiempo, pero sin duda los años es la forma más arraigada en nuestra cultura. Prueba de ello son las grandes celebraciones que se producen cada año por estas fechas y no solo con motivo de la Navidad, sino también por el cambio de año. La significancia es tal que la gran mayoría de la población lo vivimos como el fin de una etapa y el comienzo de otra. Muerte y resurrección en un mismo día. Un antes y un después en la vida de todos.
MOMENTO DE HACER BALANCE
Si algo tiene de positivo el cambio de año es la oportunidad que te regala para comenzar de cero, para hacer borrón y cuenta nueva, para auditar tus sueños y diseñar tu futuro con intención. Y, para ello, no hay mejor manera que echar la vista atrás. Pero ojo, hablo de echar la vista atrás, no de que te quedes anclado en el pasado.
Para ello, me gustaría compartir contigo un sencillo ejercicio que te ayudará a hacer balance del último año e identificar todos los aprendizajes que puedes sacar de cada experiencia. Pero, antes de comenzar, debes tener en cuenta dos puntos muy importantes:
– Analiza todas las áreas de tu vida (personal, profesional, salud, etc). No te limites a poner el foco en unas sí y otras no. Aunque a ti no te lo parezca, en la escala de realización del ser humano, los amigos tienen tanto valor o más que la familia y lo mismo sucede con el resto de aspectos de la vida. No hay uno más o menos importante, todos cuentan. Se trata, por lo tanto, de encontrar el equilibrio. No de tener más de aquí y menos de allí.
– Asegúrate que tu mirada sea constructiva, no destructiva. De nada sirve traer de vuelta el pasado si lo que vas a hacer con él es utilizarlo como excusa para reprocharte y censurarte por decisiones y/o actitudes que tomaste en un momento determinado.
Y, ahora, ya puedes comenzar con el ejercicio:
- Reflexiona sobre todo lo que ha sucedido en tu vida a lo largo del pasado año y anota en forma de lista los eventos más significativos para ti.
- Divide todo lo que has anotado en este listado en dos columnas, una para “éxitos” y otra para “errores”.
- Al lado de cada uno de los éxitos y errores, anota qué lección has aprendido de cada uno de ellos.
- Para acabar, en la columna de “errores”, escribe justo al lado (o debajo) de cada uno de ellos, una acción que podrías llevar a cabo en este nuevo año para enmendarlo o convertirlo en un éxito -siempre que sea posible-.
- Y lo mismo en la columna de “éxitos”, anota justo al lado (o debajo) de aquellos que consideres necesario, una acción que te haya llevado a este logro y que deseas seguir potenciando de cara al nuevo año.
LA RECETA DEL ÉXITO
Y es que son tantas las ocasiones que buscamos fuera las respuestas que llevamos dentro… Tantas las veces que solemos perdernos en libros, cursos y técnicas que, lejos de acercarnos a ellas, nos alejan. Pero, en realidad, todo es mucho más sencillo de lo que nos han contado. Todo lo que necesitas está dentro de ti y siempre lo ha estado. Las preguntas y las respuestas. Puedes estar seguro de ello.
No obstante, es cierto que, en algún momento de nuestra vida, todos necesitamos a alguien que nos guíe a través del laberinto de nuestro interior y arroje algo de luz entre tanta oscuridad. Y, eso es precisamente lo que pretendo desde aquí, ofreciéndote contenidos de la mejor calidad, mi formación en Libertad Cuántica y la posibilidad de realizar sesiones individuales para analizar tu caso en profundidad. ¿Me dejas acompañarte?
FELIZ SALIDA Y ENTRADA DE AÑO
Pero, antes de despedirme y felicitarte el año nuevo, me gustaría recordarte que el sentido de la vida (de tu vida) se mide a través de objetivos que alcanzar, retos que superar y sueños que cumplir. Así que no dejes que nadie los decida por ti. Toma consciencia de tus errores y, por supuesto, también de tus logros, porque esta será tu particular receta para un nuevo año 2019 más próspero y más feliz.
Te deseo, de todo corazón, que estés pasando unas fiestas maravillosas en compañía de tus seres queridos. Espero que despidas el año como se merece: con gratitud y una gran sonrisa, y que des la bienvenida al nuevo año 2019 con objetivos claros y ganas renovadas. ¡Ah! Y si necesitas ayuda con tu lista de propósitos de año nuevo, no te pierdas el próximo artículo del blog… que, además, será ¡el primero del nuevo año!
¡Felices fiestas y muy próspero año nuevo!
Con todo mi cariño, Sami Osorio
P.D: Si este articulo te ha inspirado, te invito a que nos lo cuentes en la sección de comentarios que tienes a continuación, ¿Qué has sentido? ¿Cómo te ha ayudado? ¿Qué dudas quedan pendientes? y, por supuesto, si así lo sientes… ¡Únete al Movimiento Cuántico y comparte! Para que juntos sigamos despertando.. 🙂
Muchas gracias por tus sabias palabras.
Feliz Año para ti y para todos las personas que lea en este momento cuántico.
Bendiciones