Mayo es uno de los meses más especiales para mí. Es el mes de mi cumpleaños. El aniversario de una nueva vida. De mi vida. Y eso me hace recordar que, de alguna manera, esta vida tan maravillosa que tengo y de la que disfruto día a día se la debo enteramente a mi familia. Porque sin todas esas personas que forman mi árbol genealógico, yo no estaría aquí hoy. Ellos son mi núcleo, la esencia de todo aquello que soy. Por ellos, por mí y por todos vosotros, hoy quiero invitaros a celebrar la vida por todo lo alto.

 

LA IMPORTANCIA DE CELEBRAR.

La llegada a mí de Libertad Cuántica no solo supuso un giro radical en mi vida profesional, también en lo que concierne a mi familia, mi mundo interno y la forma en la que me enfrento al día a día. Si estás entre mis seguidores más fieles, seguro que me habrás oído hablar en más de una ocasión de la prosperidad, la abundancia y el “dar para recibir”. Pues bien, a esto me refiero cuando digo que es importantísimo celebrar la vida, celebrar nuestros pequeños logros, manifestar nuestra alegría ante aquello que tenemos y somos.

Cuando celebramos, estamos mandando un mensaje de gratitud al universo. Celebrar es reafirmar nuestra alegría por la vida que vivimos y, sin duda, es atraer más de lo que nos hace felices. Podríamos decir que se trata de algo así como un círculo virtuoso en el que el éxito llama al éxito. Y tú, ¿te animas a probar?

Además, el día de nuestro cumpleaños es el momento ideal para poner en práctica estas leyes. Tómate el tiempo de parar, rodéate de tu familia y da las gracias. Agradece al universo por permitirte estar aquí y vivir esta experiencia única. Agradece a tus padres por haberte dado la vida. Agradece a todos tus maestros por haberse cruzado en tu camino y haberte enseñado las lecciones que necesitabas aprender para llegar hasta donde estas hoy.

 

NUESTRO ORIGEN: LA FAMILIA.

La celebración de nuestro cumpleaños es también la celebración del momento en el que nuestra madre nos dio a luz. Sin duda, un momento mágico en la vida de la mayoría de las mujeres. Mágico por el milagro que supone la gestación de una vida, pero mágico también porque cada uno de nosotros trae consigo una gran cantidad de información de nuestros antepasados que puede ser clave para descubrir nuestro lugar en nuestra familia y en el mundo.

Para entender nuestro presente, debemos entender nuestro pasado. Y de ahí que sea tan importante trazar el camino que dibuja nuestro árbol genealógico. Gracias al estudio de cada una de las generaciones que nos preceden, es posible dar respuesta a muchas de las cuestiones existenciales que a menudo nos perturban e impiden que avancemos con paso firme hasta convertirnos en la persona que hemos venido a ser.

Si bien es cierto que la familia es uno de los grandes pilares para el ser humano, me parece imprescindible reconocer que no siempre es posible (y, a veces, ni siquiera deseable) mantener una relación cercana y amistosa con todos sus miembros. Es muy común encontrarnos con personas que confunden relación con vínculo cuando, en realidad, son dos conceptos totalmente distintos.

La relación puede darse o no, depende de diversos factores y puede variar de una época a otra de nuestra vida. Sin embargo, el vínculo con nuestra familia nos acompaña siempre, creando un maravilloso lazo invisible que nos mantiene unidos unos a otros a lo largo de generaciones y generaciones.

El día de nuestro cumpleaños es el momento perfecto para celebrar nuestra trayectoria vital junto a nuestros seres queridos.

 

¿CÓMO CUIDAR NUESTROS VÍNCULOS FAMILIARES?

La importancia radica, por tanto, en los vínculos invisibles que nos unen a las personas de nuestra familia más que en las relaciones (más o menos superficiales) que podemos llegar a establecer con algunos de ellos. Recuerda que unos vínculos fuertes, sanos y basados en el amor son el punto de partida para disfrutar de una vida plena y satisfactoria. Pero ¿cómo hacemos para cuidar nuestros vínculos familiares? ¡Muy sencillo! Para ello, este mes tan especial te propongo un reto de 3 pasos:

  1. El primer paso es tomar consciencia de su propia existencia. Investiga quién eres y descubre a qué has venido a este mundo gracias a la gran cantidad de información que esconde nuestro pasado. Puedes comenzar preguntando a tus familiares más cercanos y estableciendo los vínculos más evidentes. Pero, no te quedes ahí. Investiga y reconstruye el entramado de vínculos que dan sentido a tu existencia. ¡Verás que es una experiencia increíble!
  2. El segundo paso es aceptar la naturaleza de dichos vínculos y, sobre todo, las personas a las que estamos vinculadas de por vida. No hay peor cosa que resistirse, que luchar contra los dictados de la vida. Por eso, te animo a que aceptes tu lugar en este mundo y a las personas que forman parte de tu red familiar. No siempre es fácil, pero para eso existen terapeutas que, como yo, estamos aquí para acompañaros en el camino de la aceptación y la sanación.
  3. El tercer y último paso es celebrar la vida. Tu vida. Cualquier excusa es buena para celebrar. Acepta quién eres y de dónde vienes para transformarte a ti y a las futuras generaciones que vendrán después. Recuerda que tú tienes la capacidad de cambiar el curso de tu vida. Un pequeño cambio en positivo dentro de ti tiene la capacidad de desatar grandes cambios en tu familia.

Descubre, acepta y sana. Estos son los pasos que debes tomar para abandonar de una vez por todas el sufrimiento y darle la bienvenida a la abundancia y la prosperidad. ¿Aceptas el reto que te propongo con motivo de mi cumpleaños? ¡Espero que sí! Además, no dejes de compartir tu experiencia creando tu propio árbol genealógico en los comentarios de más abajo. Hoy, más que nunca, te doy las gracias de todo corazón por seguirme durante este viaje tan maravilloso a lo largo del ultimo año. Espero que te haya gustado mi regalo de cumpleaños.

Un abrazo cuántico, Sami Osorio de Libertad Cuántica